Últimamente en el club hemos andado
más liados que John Travolta un sábado por la noche… Tenemos salidas por
doquier para todos los gustos y de todos los colores…
El pasado domingo, sin ir más lejos,
se nos pasó por la cabeza cumplir con la tradición de ascender el Mortirolo.
Bueno, digamos que también hay quien lo
conoce como el Tourmalet. Pero nosotros somos más del Giro… ja,ja,ja… Pongamos
para entendernos que se trata del Collado del Río Peces. Todo un clásico del
MTB segoviano.
Había entre nuestras filas quien aún
no había probado las lindezas de la escalada. Rober llevaba tiempo pidiendo a
gritos ponerle una equis. Pues nada, deseo concedido…
Así pues, arrancamos de mañana rumbo
al azud. Antes llegar decidimos tomar un aperitivo. Así que giramos por Valdeconejos
hasta alcanzar la pista. Hala! Ya vamos calentitos… listos para subir el
puerto.
No sin esfuerzo le ganamos la partida
al coloso. Arriba, el pino solitario nos brinda la parada perfecta para reponer
fuerzas. Pues todavía la aventura no ha hecho más que comenzar…
Después de bajar el arrastradero (más
limpio que el jaspe), tomamos el camino de Palominos, y de ahí, a Fuente La
Reina.
Toca decidir rumbo. Huyendo de las
Pesquerías, abarrotadas de ‘charlies’, nos vamos por la Majada del Cochino. Qué
suerte hemos tenido!! Por aquí no hay ni uno…ja,ja. Luego, en Los Aleonardos,
Duke tiene un capricho: la bajada de Navalacamella. “Adrenalítica” según Diego…
Qué le vamos a hacer? Si el chico se empeña…
Como dicen los entendidos: “mountain
bike en estado puro”.
Triky